
Sobre La magia
German Garcia
Para hablar de la magia, primero hay que hablar de sus orígenes. De su historia, y de lo que esta significa hoy en día.
Con esto dicho, se puede empezar diciendo que la palabra magia, como tal, proviene del griego mageia y significa ¨Cualidad de Sobre Natural¨. Así mismo, esto proviene de la palabra magos (mago) y el sufijo -ia (cualidad).
Si bien la historia de la magia es compleja, una historia que nos ata a los inicios de la magia actual, relata que poco antes de la Navidad de 1611, una niña condujo a su anciana abuela ciega hasta la casa de un molinero para reclamarle el pago de un trabajo reciente. Nada dispuesto a pagar, el molinero gritó a las mujeres: <¡Fuera de mis tierras, rameras y brujas o quemaré a una y colgaré a la otra!>
La mujer mayor buscó venganza, y sabía cómo obtenerla. Más tarde diría: <La forma más rápida de tomar la vida de un hombre mediante brujería es hacer una figura de arcilla semejante a la persona a la que quieras matar>, luego clavarle una espina o una aguja para causarle dolor, quemarla y <acto seguido, por esos medios, el cuerpo morirá>.
Esta mujer, que creía ser y era considerada por otros una bruja, se llamaba Elizabeth Southerns, también conocida como la Vieja Demdike. Tenía ochenta años y fue una de las veinte personas arrestadas en los juicios de las brujas de Pendle, en Lancashire (Inglaterra), en 1612. Ella murió a la espera de juicio, pero diez de los acusados -entre ellos Alison, nieta de Elizabeth- fueron ahorcados por haber embrujado a otros para matarles <mediante prácticas satánicas y medios diabólicos>.
Suzannah Lipscomb.


¿Qué es la magia y cómo se utiliza?
La magia es aquel arte que comprende el uso y entendimiento de las artes ocultas. Esto se puede interpretar de diferentes formas, pero la más adecuada es interpretarla como lo que es: Una forma de entender lo desconocido. Una manera en la que podemos comprender aquello que está más allá de nuestra realidad y de nuestra mirada común.
Por siglos la magia estuvo reservada para los líderes de las sociedades, para los chamanes o los magos de sumeria, cuyos rituales servían para dar fertilidad y abundancia.
Este fin no es uno que haya cambiado mucho, y hoy en día el mago, el brujo, el ocultista, es aquel que tiene la habilidad de acercarse a estas artes ocultas y que se toma el tiempo de comprenderlas, de estudiarlas y de practicarlas por años hasta llegar a un punto en el cual puede obtener prosperidad y utilizarla según su deseo.
Aquel que ha caminado por el sendero de este arte sabe que es demandante, pero que sus beneficios son varios. Aquel que persevera siempre llega a su meta, y aquel que aprende bien siempre asegura su protección de aquellos seres que acosan y no dan paz si la forma de hacer no es la adecuada.
Germán García

